Las matrioskas aparecen por todos lados, se escucha el Kasashov en las esquinas, la silueta de los muros del Kremlin Moscovita traza una pincelada sobre el naranja atardecer. Estamos en Rusia!
La Copa del mundo FIFA tiene características particulares porque todas estas aventuras de coberturas internacionales parecen ser iguales pero a la vez se diferencian gracias al entorno e idiosincrasia de cada lugar. El fútbol nos trajo aquí y el fútbol nos une una vez más durante todo este mes.
La corta ceremonia de apertura tuvo como en las clausuras de otros años, trazos musicales, fusionando los ritmos modernos de Robbie Williams con la voz clásica de la soprano Aida Garifullina, mientras que Ronaldo y casillas prestaban su maquillada imagen para rubricar la presencia deportiva. Al final nada extraordinario y el partido inaugural un monólogo ruso como en las época de la Unión Soviética por la calle del medio, de un solo color y sin medias tintas. El 5-0 ha sido uno de los resultados más abultados de inicio de mundial y las estadísticas nos hacen reaccionar para recordar las sorpresas y que desde Suecia 58 cada 20 años los locales llegan a la final. ¿Podrán en los Urales?
El balón sigue rodando y notros entre aviones y trenes de distancias larguísimas llegamos a Sochi para disfrutar de lo mejor visto hasta ahora. Ahh ! no me refiero a las playas, el bulevar Marítimo o la infraestructura deportiva de esta ciudad vacacional reconstruida para Los Juegos Olímpicos de invierno. Digo el partido más entretenido del mundial entre España y Portugal. Lo visto en la grama de Fish paga verdaderamente la entrada, selecciones plagadas de estrellas, ofensiva, jugadas, goles y emoción. Lo demás es relleno. Un partido donde Cristiano, héroe al fin, consigue su primer Hat Trick mundialista y frente a compañeros del Real Madrid ¿cuánto más vale el portugués ahora? Herencia de Eusebio, el delantero es medio equipo por no decir todo.
En las calles las banderas se entremezclan, los idiomas también y siempre mejicanos y latinos son los más bullangueros, aunque sorprenden los Incas que celebran como ninguno la presencia de Perú en esta cita universal luego de 36 años. Las masas se juntan cerca de la plaza Roja que de noche es un verdadero espectáculo multicolor, tan iluminado como esta fiesta futbolística que apenas comienza y que seguiremos contando.